Baloncesto Femenino. Reflexiones

El pasado jueves asistí a la semifinal de la "Liga Femenina de Baloncesto".

Jugamos en casa contra el todopoderoso "Valencia Basket".

Van aquí algunas reflexiones.

Cuando a Vinicius le llaman "mono", este país estalla contra el "racismo", y me parece bien.

El jueves en el partido de nuestro Casademont, a mi alrededor escuche cosas que están completamente fuera de lugar, pero que se toleran, en general ni nos inmutamos.

Alina Iagupova ha sido el fichaje estrella del Valencia Basket. Es quizás, la mejor jugadora de Europa.

Te podrá gustar más o menos, pero decirle; "Macho, Cabrón, Te voy a dar un patada en los huevos", es además de una falta de respeto una discriminación a una mujer por su aspecto físico.

Esto no vale, así no vale.

Y no vale porque si Alina jugase en nuestro equipo solo le diríamos cosas bonitas.

Tampoco me vale que insultemos a las jugadoras del equipo contrario.

Es cierto, que en ocasiones, hay comportamientos antideportivos, pues venga a abuchear, que para eso estamos, pero de verdad que el jueves (al menos a mi alrededor) el insulto era constante.

Es cierto que el arbitraje fue penoso. Nos perjudicaron y mucho, pero yo no estoy hablando de eso.

Mariona, nuestra Mariona, ha tenido que cerrar su cuenta de Twitter (lo siento, me niego a llamarle X) porque criticó a los árbitros y la afición del Valencia no paraba de insultarla. 

Vega, nuestra Vega, nuestra CAPITANA (sí con mayúsculas), puede que juegue su último partido oficial en Valencia, su casa.

¿Os gustaría que la empezaran a insultar desde el minuto uno?

No verdad ?

Por ello le pido (me pido) a esa #MareaRoja incombustible que siga dando ejemplo de lo que es una afición.

Una afición que anima siempre, sobre todo en los peores momentos. Una afición respetuosa con el equipo contrario.

Una afición que a fin y al cabo es el alma de todo deporte.

Cuento con vosotros, con vosotras. 

Cuando en enero nos clasificamos para los cuartos de final de la Euroliga frente al Lublin, Vega contó una anécdota.

“He hablado con uno de los árbitros y le he dicho: ‘No has pitado en un pabellón así en tu vida’. Y me ha dicho: ‘La verdad es que no, para mí es el mejor pabellón de Euroliga’. 

Esta es la #MareaRoja que yo quiero y seguro que vosotros y vosotras también. 

Muchas Gracias 

Las fotos son prestadas, fundamentalmente del Heraldo de Aragón y del Periódico de Aragón.